Me sentí obligado a escribir algo pues algunas de las personas que son parte de esto últimamente han estado muy prolíficas. Y a mí me gusta la idea de ser parte de algo. Especialmente de algo que me supere. Ahora diré algunas cosas más o menos graciosas, ligeramente interesantes.

1. Hay ocasiones en las que mi retorcida mente me juega malas pasadas, especialmente cuando voy a los baños de algunos restaurantes cuya administración prefiere, en lugar de poner "Hombre" y "Mujer" para distinguirlos, pone "H" y "M". ¿Significa esto hembra y macho? ¿Mujer y hombre? ¿Hermafroditas y murciélagos? Es difícil esto. No tengo problemas con los abanicos ni las pipas, pero debería tenerlos. Tampoco tengo problemas con los triángulos y los palitos. En un restaurante, en el Tezca del Hotel Nikko, tienen, para distinguir los baños, en uno una tuerca y en otro un tornillo. Finísimo.

2. Cuando entran al blog del que son administradores, ¿no están tentados siempre a cambiar los valores? Aparentemente hay una opción.

En fin, supongo que no fue tan gracioso como esperaba que lo fuera. A veces así pasa.